"Cristina merece otro mandato como presidenta"
El funcionario de la Unasur dice que Lula debe ser el reemplazante de Kirchner
Por Carlos Paillet.
Rafael Follonier es un influyente dirigente kirchnerista que ocupa el cargo de jefe de Gabinete de la Secretaría General de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el puesto que quedó vacante tras el fallecimiento de Néstor Kirchner. Es decir, Follonier ha quedado virtualmente al frente de la secretaría del bloque regional hasta que se designe al reemplazante del ex presidente argentino.
En materia de política doméstica, Follonier le da un enfático respaldo a la presidenta Cristina Fernández; y no sólo para lo que resta de su mandato en la Casa Rosada hasta diciembre de 2011
“A mí me encantaría que Cristina fuera presidenta un mandato más. La verdad es que me gustaría y, además, creo que se lo merece”, afirmó el dirigente anoche, durante una entrevista con La Voz del Interior.
Follonier dio ayer un par de charlas en encuentros con militantes del Peronismo Militante (Megafón), que tiene entre sus referentes a la legisladora Nadia Fernández y a la concejala Virginia Pagnanini.
En relación con el tema específico del sucesor de Kirchner en la Unasur, Follonier se inclinó decididamente por el presidente de Brasil, Luis Inacio Lula da Silva, quien culmina su mandato el 1º de enero próximo.
–Se menciona a varios líderes de la región para asumir la Secretaría General de la Unasur, entre ellos a Lula. ¿El Gobierno argentino lo apoyaría para el cargo que dejó Kirchner?
–Bueno, habría que esperar a que Lula deje su mandato como presidente de Brasil. Pero obviamente que sería un secretario general espectacular. Yo creo que Néstor (Kirchner) estaría muy contento si a él lo reemplaza nada menos que Lula.
–Más allá de su deseo de que la presidenta Cristina Fernández continúe su mandato en 2011, ¿cómo ve el panorama político nacional de cara al año que viene?
–Veo con mucho entusiasmo la intervención cada vez más masiva de la juventud. Es fantástico ver participar a la gente joven de esta manera y creo que nos debe alegrar a todos; no solamente a nosotros, que hemos recibido un espaldarazo, toda esta expresión de afecto multitudinaria, sino a todos, porque en los otros partidos también hay jóvenes decididos a participar.
–Volviendo a la Unasur, ¿cómo se reacomodará el bloque tras la muerte de Kirchner?
–Bueno, Kirchner es irremplazable; único e irremplazable. Pero la integración territorial, la integración de Sudamérica, de este nuevo organismo político que es la Unasur, cuenta con enormes posibilidades de seguir. Hay que elegir a un nuevo secretario General que continúe la tarea de Néstor; una tarea en la que muchos no creían, pero él rindió su último examen como líder y dirigente internacional. El proceso de integración va a continuar porque hay 12 presidentes sudamericanos de continuar con ese proceso. Kirchner era un elegido por esos 12 presidentes. Hay un combate y una tarea diaria en la integración. Pero además de la voluntad de los presidentes, existe la voluntad de los pueblos de integración.
–¿Hay diferencias de criterio entre algunos presidentes que conforman la Unasur?
–Somos un territorio de paz y de democracia. Había muchos que pensaban que no nos íbamos a llevar bien, con gobiernos tan distintos, como el de (Hugo) Chávez y el de (Sebastián) Piñera. Bueno, Piñera acaba de hacer votar en Chile la pertenencia y la ratificación del Tratado de la Unasur; y acaba de proponer, Piñera, una cláusula democrática en la Unasur. El colombiano (Juan Manuel) Santos es un presidente de quien también se pensaba que iba a ser refractario a la integración sudamericana, y fue él quien llamó a la Unasur, y en particular a Néstor Kirchner, para que lo ayude a resolver el enorme conflicto en el norte de Sudamérica.
–¿Fue exitosa la gestión por la crisis en Ecuador?
–Hemos sabido hacer las cosas. Como la velocidad con que Cristina Kirchner convocó a los presidentes y, también, con la velocidad con la que vinieron los presidentes a la reunión de Buenos Aires. Fuimos, los cancilleres y este representante que Kirchner nombró, a la plaza de Quito donde minutos antes habían estado los que intentaban golpear la democracia de los ecuatorianos. Y fuimos no sólo a defender la democracia de los ecuatorianos, sino la democracia de todos los sudamericanos. Hay un sentimiento que viene de abajo, de la gente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario